martes, 30 de mayo de 2017






Carta imaginaria


Esta actividad, como bien dice su nombre, trata de escribirle una carta imaginaria a alguien o a algun personaje ficticio

Carta:

Para: Adelina Amouteru                                                              
Dirección: Dalia, Southern Kenettra
                                                                                                                                      Málaga, 30 de mayo 2017
Querida Adelinetta:

Bueno pequeño y blanco lobo, Adelinetta, posiblemente nunca llegarás a recibir esta carta por lo que ya todos sabemos, pero desde aquí hasta donde tu estés te mando las gracias por mantenerte fuerte en todo momento y saber superarte hasta en los momentos en los que la oscuridad te consume, quién diría que una vez fuiste oscuridad cuando hoy eres una estrella, has sido valiente hasta el último momento no solo por ti, también por los demás, por Magiano, Enzo, Violetta..., por Violetta.
Gracias de nuevo por darme un motivo por el que amar la lectura y amarte a ti. 

                                                                                    ..., envainé su espada en mi cinturón, me eché su capa
                                                                                 sobre los hombros, cogí su corazón entre mis brazos y,
                                                                                 de algún modo, seguí adelante.
                                                                                                                 
                                                                                                           




                                                                                                            Fdo: Maeve Jacqueline Kelly Corrigan


 



He hecho esta carta a Adelina que es la protagonista de mi trilogía favorita y la que me hizo adentrarme en el mundo de los libros. 
Diría el nombre de la saga pero creo que la carta lleva un poco de spoiler y si os los leeis algún día no os acordaréis si quiera de mi carta, de lo contrario si digo el nombre si.
Ahora os voy a dejar una leyenda que sale al final de algunos libros del tercer libro y a mi justo me tocó, o al menos quiero pensar eso. No lo encontraba por ningún sitio, pero merece tanto la pena que lo voy a escribir yo misma.


La leyenda la cuentan tanto miembros de la realeza como vagabundos, nobles y campesinos, cazadores y granjeros, los ancianos y los jóvenes.

La leyenda proviene de todos los rincones del mundo,

pero no importa dónde se cuente, es siempre la misma historia.

Un chico a caballo, deambulando por la noche, atraviesa bosques o cruza
llanuras o recorre orillas. El sonido de un laúd flota en el aire del
atardecer. En lo alto están las estrellas de un cielo despejado
un manto de luz tan brillante que el chico alarga los brazos,
intenta tocarlas. Se detiene y baja de su caballo. Entonces espera.
Espera exactamente hasta la media noche, cuando la constelación
más reciente en el cielo de ilumina de pronto.
Si te quedas muy callado y no apartas la mirada, puede que veas la
estrella más brillante de la constelación aumentar de intensidad
ritmo constante. Se hace más y más brillante hasta que ensombrece a
todas las demás estrellas del cielo, hasta que parece tocar el suelo,
y entonces el resplandor desaparece y en su lugar hay una chica.
Su pelo y sus pestañas están pintados de un plateado rielante, y una
cicatriz cruza un lado de su cara. Va vestida con trajes de las 
Tierras del Mar y un collar de zafiro.
Algunos dicen que, érase una vez, 
tenía un príncipe, un padre, una sociedad de amigos.
Otros dicen que en el pasado fue una reina malvada, una ilusionista
una chica que cubrió las tierras de oscuridad. 
Y otros dicen que tenía una hermana y que la quería con toda su alma.
Quizá todas estas versiones sean verdad.
Camina hasta el chico, levanta el rostro hacia él y sonríe. Él se
agacha para besarla. Después la ayuda a subir al caballo y los dos se alejan
cabalgando hacia algún lugar lejano, hasta donde alcanza la vista.
Esto son solo rumores, obviamente, y constituyen poco más que un
cuento que contar alrededor del fuego. Pero se sigue contando.
y así sigue existiendo

Aun sigo llorando cuando leo esto y me acuerdo de los libros.

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